Las diferencias son inevitables porque el conflicto es inherente a la condición humana. Mantener la armonía requiere de un trabajo conjunto de toda la Familia Empresaria. Si bien cada empresa y cada familia es muy diferente, comparto con vos 5 consejos que son pilares en nuestra disciplina:

1) Abordá las diferencias a tiempo. Es una práctica habitual de las Familias Empresarias dilatar el conflicto bajo la premisa de evitar los enfrentamientos. Está comprobado, eso no hace mas que acrecentar las distancias entre los familiares y acumular tensiones.

2) Separá los bolsillos. Diferenciar los bienes y el origen de los egresos. Un bolsillo es el patrimonio personal o familiar. Otro es el de la empresa. Algunos gastos son regalos de padres y madres a sus hijos, otros son gastos corporativos de representación, honorarios o sueldos.

3) Formate vos y tu familia. El capital intelectual es el mayor valor de una Familia Empresaria. Aprender a ocupar los distintos roles (accionista, director, gerente) actuales y futuros es un proceso que lleva tiempo y, cuanto antes comience, antes estarán preparados para un traspaso generacional ordenado.

4) Establecé espacios diferenciados para conversar como FAMILIA y como EMPRESA. Que la cena de los viernes o el asado de los domingos sean un tiempo de protección de la familia. Durante la semana realicen la reuniones de trabajo donde se fomente la escucha activa sin dar por entendido lo que el otro quiso decir y sin poner palabra en boca de otros. Esto permite a padres/madres e hijos/as en su rol de empresarios escuchar, incluso, aquello que preferirían no oír.

5) Transitá un proceso de Acuerdos Familiares. En este proceso se construirán los pactos y se propondrán las soluciones a problemas actuales y futuros. Los Acuerdos Familiares van a gestionar constructivamente las diferencias y el compromiso de su cumplimiento es la clave principal para la armonía, la paz y la continuidad de la Familia Empresaria.